"El palacio más grandioso del mundo". Era el desep de Felipe V cuando encargó, en 1735, la construcción del actual Palacio Real sobre las cenizas del antiguo Alcázar, en la actual calle Bailén.
Desde aquella época viene la superstición de que los terrenos de la Cuesta de San Vicente y la Calle Mayor han estado habitados por brujas, duendes o fantasmas, que empezaron a manifestarse durante el reinado de Alfonso VI y la construcción del antiguo Alcázar por haber perturbado su paz.
Pero el acontecimiento más relevante fue el incendio del edificio en la Nochebuena del año 1934, momento en el cual el antiguo Alcázar quedó destruido, motivando la construcción del actual Palacio Real, el más grandioso según las palabras de Felipe V.
Cuenta la leyenda que, para que no se pudiera construir edificio igual, el rey ordenó que se le sacaran los ojos al arquitecto, Filippo Juvara, y se le cortaran los brazos y la lengua.
Siempre se ha creido que una de las cabezas que adornan el frontispicio pertenece a Ventura Rodríguez, sin embargo, cuenta la historia que la cabeza se esculpió en memoria del tan mal tratado arquitecto del palacio; y que durante la noche, se escuchan los pocos ruidos que el espíritu de un pobre fantasma sin lengua, puede emitir.
Parte de estas historias acerca del Palacio Real fueron recogidas en los Avisos de Madrid. En ellos informaba el cronista Jerónimo de Barrionuevo en 1658, relatando los golpes pausados que podían escucharse en el palacio hasta el alba, en distintas ubicaciones, como la capilla o la torre. O la muerte de un sirviente tras acudir a misa a la Iglesia del Buen Suceso, donde dijo ver la presencia de la propia muerte.
En definitiva, podemos afirmar que Madrid es la ciudad que nunca duerme, pero no precisamente por la actividad de sus calles... al parecer hay más vida de la que podemos o queremos saber...
El Palacio Real, situado entre la Calle Mayor y la Cuesta de San Vicente, en la calle Bailén, s/n; se encuentra abierto al público de octubre a marzo todos los laborables de 9:30 a 17:00 (domingos y festivos de 9:00 a 14:00), y de abril a septiembre todos los laborables de 9:00 a 18:00 (domingos y festivos de 9:00 a 15:00). Se encuentra cerrado durante acontecimientos oficiales, el precio de la visita es de 7 euros, siendo los miércoles la entrada gratuita.
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