LAS EXPERIENCIAS DE RAMONCÍN

Sí, aunque parezca mentira, el famoso cantante cuenta las espeluznantes experiencias que ha presenciado, tras las que ha dejado de ser una persona escéptica.

Ramoncín vivía con su madre, el marido de ésta y siete hermanos en la calle Augusto Figueroa de Madrid desde 1957 hasta 1997. Se trataba de una mansión conocida por todos los vecinos como "La Casa del Loco", por haber estado habitada por una familia que desheredó a su hijo, que tiempo después consiguió hacerse con la casa y comenzó a vivir en ella, durmiendo en el hueco de la escalera sin encender nunca las luces de ninguna habitación porque temía de ese modo atraer a los fantasmas.

Cuando años más tarde la casa fue habitada por la familia de Ramoncín, los fenómenos paranormales se sucedieron cada vez con más frecuencia. La madre y los hermanos del cantante oían voces, ruidos y notaban presencias.

Los niños estaban tan asustados que no querían quedarse solos, y, un día, todos escucharon al menor de los hermanos, Alejandro, gritando, y al acudir en su ayuda, lo encontraron arrinconado y muy asustado, según explicó después porque oía voces que le hacían preguntas. También se enteraron de que los niños que acudían a visitar a los hermanos dejaron de hacerlo por miedo a las voces.

Pero uno de los sucesos más extraños tuvo como protagonista a la madre de Ramoncín. Hace años, poco después de la muerte de su marido, fue al Rastro y compró un cuadro. El cuadro representaba a varios individuos que, desde distintos planos, miran al espectador. Cuando su madre llegó con la pintura a casa y quiso enseñárselo a sus hijos, los chavales, al unísono, creyeron que su madre les gastaba una broma porque uno de los individuos del cuadro era inequívocamente el fantasma que en alguna ocasión habían visto.

Existía en la habitación de la madre de Ramoncín un armario que precisaba de la ayuda de varias personas para ser abierto por la antigüedad y el peso de sus puertas, pues bien, un día en el que la madre de Ramocín se hallaba sola en la habitación, tumbada en la cama, y pensando en que sus hijos se habían marchado de casa. De pronto susurró "Qué sola estoy..." y el armario se abrió y la madre de Ramoncín notó como alguien que no podía ver pero sí sentir, salía de sus puertas.

Los expertos hablan de una casa maldita, pues estas casas se caracterizan porque los crujidos y ruidos son sonidos perfectamente normales dentro de cualquier construcción (viento, movimientos de los vecinos...); es decir, los sinodos son normales pero en una situación anormal (por ejemplo que se escuche viento en una habitación en un día soleado).

Pero las explicaciones parece que apuntan más a un espíritu burlón, que se dedica a tocar las narices, más que a hacer maldades. Por eso comentábamos que el término "casa maldita" no es demasiado afortunado.

Otras experiencias vividas por el propio cantante son la de la contemplación de un OVNI durante su juventud en Santa María del Tiétar, en la que pudo observar incluso a los extrterrestres; y la visita a la pirámide de Keops, en la que los relojes se descontrolaban, así como las videocámaras.

¿Realmente algo paranormal es la causa de estos sucesos? ¿O es que Ramoncín no cambió las pilas de la cámara y el reloj?

El propio Ramoncín cuenta estas dos últimas historias en http://www.youtube.com/watch?v=798jiipvCH0.